Tenía al enemigo en casa. Un joven denunció en comisaría que alguien estaba sacando dinero de su cuenta de ahorros sin que hubiera extraviado la tarjeta. La investigación de los agentes permitió determinar que el presunto caco no era otro sino su compañero de piso, un joven de 24 años que conocía dónde la víctima guardaba su tarjeta de crédito y su código PIN. Se da la circunstancia de que éste fue con su compañero a Comisaría para denunciar los hechos. El total de lo sustraído ascendería a unos 1.700 euros.
Autor: igor astorga