Fueron miles los burgaleses y visitantes que se dieron cita una vez más en esta nueva edición de la Noche Blanca. Largas las colas para visitar el Ayuntamiento, el Forun Evolución o los distintos museos y exposiciones que en esta noche abrían sus puertas, al igual que lo eran para poder reponer fuerzas en los establecimientos de hostelería, ?llenos hasta la bandera?.
Los burgaleses no defraudaron, y la Noche Blanca tampoco, si bien es verdad, que con un presupuesto muy inferior al del pasado año, las distintas actividades llenaban las calles de Burgos, con gente haciendo su ?horario? para disfrutar del mayor número posible de ellas.
El Arco de Santa María y la Catedral se llenaron de luz, color y música, sirviendo de improvisados lienzos ?de lujo?, en los que las alusiones al hilo conductor de esta edición, la celebración del V Centenario de ?Las Leyes de Burgos?, estuvieron presentes en los mensajes proyectados. En todas las fachadas de la Catedral, los colores transformaron la piedra con colores que embellecían más aún si cabe, la Seo burgalesa abarrotada en sus inmediaciones, Gamonal estrenaba iluminación en una de sus iglesias más queridas, La Antigua, que también se lleno de color, los niños hicieron caso al autor, Juan Méjida, y tocaron y se subieron a las estatuas de gran formato instaladas en el entorno del puente de Santa María, ?El canto de sirenas? desconcertó a más de uno que esperaba ?algo más?, largas colas en los museo y espacios para visitar o el Forum Evolución, que no defraudó las expectativas de ?casi? ninguno.
Muchas actividades, mucho público y buen tiempo, que más se puede pedir?
Autor:
