El lechazo de la IGP ha estado presente en INTUR, como ingrediente fundamental de las tapas ofrecidas en el stand de Aranda de Duero, junto a los vinos de la Ribera del Duero.
La "cocina en miniatura" que representan las tapas de lechazo de la IGP y el maridaje con el vino Ribera del Duero, está teniendo un rotundo exíto en las catas maridadas que se están celebrando en el stand de Aranda de Duero en INTUR, donde la cocina de vanguardia y los buenos caldos de la Ribera hacen disfrutar de una sensación de sabores a todo el que allí se acerca.
El restaurante Los Rastrojos ha elaborado "bocaditos" de lechazo de la Indicación Geográfica Protegida de Castilla y León, para el deleite y disfrute de los que allí se acercan, y que se podrán degustar dentro de las actividades que se desarrollan en el stand de Aranda. El aforo con que cuenta el stand para las catas es de 15 asistentes, por lo que al final de las cuatro jornadas de feria, serán más de 350 personas las que podrán disfrutar de este placeer gastronómico.
Una de las apuestas fuertes del Ayuntamiento de Aranda de Duero, es el turismo gastronómico y del vino, por lo que estas catas son el escaparate perfecto para su muestra. La colaboración de D.O. Ribera del Duero y la IGP con el Ayuntamiento arandino ha sido fundamental para desarrollar esta actividad, además de la participación del Restaurante Los Rastrojos, cuyos cocineros han sido "el alma" de estos novedosos bocaditos que han conseguido un maridaje perfecto con los buenos caldos de la comarca.
Las catas se realizarán diariamente a las 12:30, 13:30, 16:30, 17:30, 18:30 y 19:30 horas. En cada cata se degustarán tres vinos y tres tapas IGP Lechazo. La primera cata unirá un Taquito Frío IGP, Tomate en Texturas, Ensalada de Brotes y un Crujiente de Yuca y un rosado Ribera del Duero. Un Salteado de Mollejas y Setas de Cardo y Espuma Rosa de IGP al que acompañará un tinto joven será la segunda propuesta y unas Cuñas de Queso de Leche Cruda IGP, Nuez, Coco y Reducción de Ribera con un tinto crianza será la tercera propuesta.
En las catas, la explicación de la comarca Ribera del Duero y de la IGP Lechazo de Castilla y León, además de los bocaditos, adentrará a los participantes en las dos marcas de calidad.
El consumo de productos de calidad es una apuesta en estas jornadas, y la IGP colabora para que la carne de lechazo se conozca como algo más que el tradicional asado. La calidad del lechazo de Castilla y León es indiscutible. Su carne blanca o de color rosa pálido y el rico y suave sabor de los corderos de las razas churra castellana y ojalada, hacen de este producto la base ideal de la cocina tradicional o de la de vanguardia.
La IGP Lechazo de Castilla y León comprende todas las comarcas cerealistas de Castilla y León (Burgos, Palencia, Zamora, Valladolid y Segovia), aunque la fama del lechazo arandino es conocida por todos.
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