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 Las cerámicas de la alfarería de La Vega han sido presentadas en sociedad. Javier Lacalle y Baudilio Fernández Mardomingo mostraban hoy algunas de las piezas de estos dos hornos del alfar bajo medieval del que en su día salieron miles de piezas esmaltadas.

Javier Lacalle y Baudilio Fernández Mardomingo han presentado hoy algunas de las piezas que se encontraron en el alfar de la Vega, un descubrimiento fortuito al realizar las excavaciones para las cimentaciones de unas viviendas entre las calles Hospital Militar y San Ignacio de Loyola en una superficie de 300 metros cuadrados. Escudillas, platos, jarras, cuencos esmaltados y vidriados o el sello de los alfareros, detalle que permitirá hacer un seguimiento de las piezas en España e incluso en el mundo, porque hay que recordar que por la época, estamos hablando del siglo XV, y los Reyes Católicos paraban por estos lugares y recibían a Colón en la Casa del Cordón. Fernández Mardomingo destacaba la importancia de este descubrimiento que ha permitido mostrar un estilo de cerámica “muy determinado”.

Han sido miles de piezas las que se han encontrado desde agosto en estos dos hornos,  y se supone que las piezas vidriadas y esmaltadas que salían de estos hornos eran de gran calidad, porque las piezas encontradas son las que se desecharon por defectos o roturas. Además, se ha podido comprobar que pertenecen a vajillas algunas de ellas hechas con molde. Una de las piezas curiosas que ha aparecido ha sido un anillo de oro con un engarce para una piedra que se supone pertenecía a una de las operarias, ya que se ha encontrado entre dos soleras de baldosas.

Carmen Alonso, arqueóloga responsable de las excavaciones, destacaba la calidad de las piezas halladas, vinculadas al servicio de mesa en su mayoría, además de piezas de desagües cerámicos y atifles, que servían de apoyo para esmaltar las piezas.

En cuanto a los hornos, no se han podido recuperar, ya que el calor al que se sometían, ha hecho que los ladrillos que les formaban se hayan deteriorado y haya sido imposible su mantenimiento.

Desde la Junta de Castilla y León y el Museo de Burgos, se realizará un inventario para catalogar las piezas y posteriormente  realizar una exposición en el último trimestre de 2016. Además, se contempla la realización de una publicación que muestre  los hallazgos encontrados.

Estos hornos encontrados se localizaban en este arrabal de la Vega, y se cree que el crecimiento de la ciudad hacia esta zona y el que estos  hornos desprendieran humos y hollines insalubres hizo que se abandonaran para pasar a otras áreas, como la zona de la calle Alfareros.

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Publicado en: Burgos
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