La campaña de la candidatura de unidad popular ha destapado el caos creado por el equipo de Gobierno con la petición masiva de la devolución del IBI.
Imagina apoya a los trabajadores y trabajadoras de la Oficina y denuncia la escasa atención y formación ofrecida por el Ayuntamiento de Burgos a estos empleados
Imagina Burgos quiere llamar la atención de la ciudadanía y denunciar un problema que, no por conocido, sigue generando un profundo malestar entre los vecinos que acuden a reclamar el IBI indebidamente cobrado y los trabajadores de la oficina Burgos Atención al Ciudadano BAC). La formación exige responsabilidades al concejal del área de Hacienda, salvador de Foronda, y al alcalde de Burgos, Javier Lacalle, y que “solucione de manera urgente” el problema “que él mismo ha generado en la BAC y en concreto con la petición de devolución del IBI mal cobrado”.
Denuncia también la mala gestión política de un equipo de Gobierno que no ha sabido o no ha querido poner fin a un problema generado por ellos mismos.
Y es que el mal funcionamiento, y la saturación de la BAC, no es nuevo sino que ocurre “desde que se instaló”. “La adjudicación del contrato tiene demasiadas incógnitas, el programa informático es un problema añadido porque en otros municipios tampoco funciona bien, la empresa apenas dio formación para sus manejo a los funcionarios y la Administración no ha formado adecuadamente a los trabajadores sobre materia tributaria”, denuncia el cabeza concejal electo de Imagina Burgos Raúl Salinero. A ello se une una plantilla que aún tiene tres puestos sin cubrir, como también quedan vacantes varias bajas temporales.
Las interminables colas de ciudadanos para impugnar y recuperar el IBI indebidamente cobrado no son imputables a los trabajadores de la Oficina, sino directamente a la “nefasta gestión del equipo de Lacalle”, mientras que la campaña de Imagina Burgos de invitar a reclamar a la ciudadanía “sólo ha hecho que poner de manifiesto” el caos en que se ha convertido la BAC desde el principio.
Trabajadores superados
El lío administrativo no es sólo por la instancia del IBI, sino porque los trabajadores ya “no dan de sí”. La plantilla de nueve personas no es suficiente para atender la cantidad de público que viene cada día”, señala Salinero. En la BAC se ha creado un ‘mega’ complejo atendido por nueve personas, que han sufrido bajas continuas por ansiedad y depresión y que manejan “un programa informático que es un desastre”. A esto se añade, según fuentes del propio Ayuntamiento, “que no se está resolviendo ningún expediente y se quedan en las bandejas plusvalías que van a prescribir”.
Además, a fecha de hoy, debería estar listo ya el padrón del IBI que aún se va a retrasar más. El concejal Foronda decía que hemos pasado de un sistema tributario del siglo XIX a un sistema del siglo XXI pero la realidad es que es “un auténtico desatino”.
Incertidumbre
Esta situación, creada por el alcalde Lacalle y su equipo deja “desprotegidos a los trabajadores de la BAC porque no les da solución a sus problemas”; y a los vecinos y vecinas de Burgos, en este caso concreto, porque el recurso presentado por Lacalle por el IBI ante el Supremo dilata los plazos y “nadie nos aclara qué va a pasar, si se devuelve, no se devuelve, se hace de oficio o no se hace de oficio… no se puede tener a la gente en esa incertidumbre que eso es lo que genera las colas”, subraya Salinero y matiza que ya “tuvimos una experiencia cuando que hubo que devolver todo el IBI por una sentencia… nos reunimos dijimos de hacerlo de oficio y que la gente estuviera tranquila y se devolvió a todo Burgos sin ningún problema y ninguna cola”, ha añadido. De hecho, apunta, “si hubiera un alcalde razonable, se habría subido el recurso a Internet para rellenarlo y resolverlo”, concluye.
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