Muestra la insustituible aportación de las personas con discapacidad para construir una sociedad más humana
La Universidad de Burgos es la primera Universidad española en recibir y mostrar la exposición “¿Y tú qué haces?”, de la Fundación Garrigou y Cooperación Internacional ONG con el apoyo del Ministerio de Sanidad.
La Vicerrectora de Internacionalización y Cooperación, Elena Vicente Domingo, acompañada de Asunción Cifuentes García, Coordinadora Centro Cooperación y Acción Solidaria de la Universidad de Burgos, presidirá mañana la inauguración de la Exposición ¿Y tú qué haces?, sobre el día a día de una persona con síndrome de Down, que tiene como objetivo dar una visión positiva de la diversidad y mostrar cómo pueden y deben de convivir las distintas realidades que componen la sociedad y en la que cada cual tiene mucho que aportar. El acto tendrá lugar a las doce del mediodía en el hall, frente al Salón de Actos, de la Facultad de Educación.
La Exposición, que ha recorrido diferentes centros educativos e instituciones y la Universidad de Burgos, recuerda la insustituible aportación de las personas con discapacidad para construir una sociedad más humana.
Iniciativas como la campaña “¿Y tú qué haces?” surgen porque la sociedad todavía no sabe bien de lo que son capaces las personas con Síndrome de Down ni lo mucho que tienen para aportar. Esta muestra forma parte del proyecto “Escuela y Talento”, que desarrolla Cooperación Internacional ONG, cuyo objetivo es “proporcionar a la Comunidad Educativa una formación integral que ayude a construir la identidad de los alumnos poniendo en práctica valores que faciliten la convivencia en sociedades plurales en los centros educativos”.
Concretamente “¿Y tú qué haces?” está pensada para que alumnos, profesores y familias conozcan más de cerca las diferentes realidades sociales. Para conseguirlo esta campaña quiere mostrar que las inquietudes, proyectos e ilusiones de las personas con discapacidad intelectual son las mismas que las de cualquier otra persona.
A través de fotos en los que se refleja un día cualquiera de un chico con discapacidad intelectual, se invita a los escolares a conocerles en su realidad cotidiana.
Por ejemplo, un estudiante con síndrome de Down indica que le cuesta un poco más hacer las cosas y las realiza más despacio pero que, como a todo el mundo, le gusta hacerlas bien. “Me gusta estudiar, hacer deporte, divertirme con los amigos. Este año he conseguido uno de mis sueños: ir a la Universidad Autónoma”, afirma el joven Jaime Anitua. “es difícil, esgrime, pero me esfuerzo mucho, porque es muy importante para mí.”
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