Marzo de 2015. Esta es la fecha en la que Burgos contará con un anillo interior totalmente cerrado y que permitirá una circulación más fluida por el perímetro de la ciudad. Javier Lacalle presentaba ayer el proyecto a la Asociación de Vecinos Nuestro Barrio y a los vecinos de Parralillos, una obra muy demandada por estas asociaciones ya que permitirá una salida más fluida de estas zonas de la ciudad. Hoy se presentaba en rueda de prensa el proyecto, 2,5 kilómetros que permitirán unir el Bulevar desde la zona de Cellophane hasta Fuentecillas y la avenida Valentín Niño.
La obra constará de dos fases, una primera de Cellophane a Hospital del Rey que se espera está concluida a finales de año, y una segunda desde Hospital del Rey a la avenida Valentín Niño, que concluirá en marzo del 2015. El nuevo trazado conectará las calles Batalla de Navas de Tolosa y Arlés con Francisco de Encinas y la avenida Valentín Niño.
Burgos contará por primera vez, como explicaba Javier Lacalle, “con una ronda interior circular que cierre todo el circuito urbano de la ciudad”. La inversión prevista es de 3 millones de euros y permitirá la conexión total de la ciudad de este a oeste y de norte a sur, creando un concepto totalmente distinto en la movilidad de la ciudad, incluida la posibilidad del transporte urbano. Lo que ha dejado claro Lacalle es que esta obra no seguirá el modelo de Herzog-De Meuron, “ya que estaríamos hablando de muchos millones más, cerca de los 20”, presupuesto inviable en estos momentos para el Ayuntamiento.
El cambio que dará esta obra a la zona será sustancial, ya que todas las zonas elevadas del trazado del antiguo ferrocarril Santader-Mediterraneo, volverán a cota “0” hasta conectar con el puente en las inmediaciones de la Fábrica de la Moneda, que se mantendrá. Serán 2 carriles, uno por sentido, aceras de 2 metros de anchura y medio metro de arcén. Algo que no se contempla es el carril bici, por considerar que no habrá una especial concurrencia de peatones, por no ser zonas residenciales.
Autor:
