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La morcilla de Burgos ha conseguido en la mañana de hoy, dos Record Guinness, a la morcilla más larga embuchada y a la más larga cocida. Han sido 187,3 metros en el primer reto y 175,3 metros en el segundo de una morcilla de 200 kilos de peso.
Han sido miles los burgaleses y foráneos que hoy se han acercado a participar en la consecución de este record. Los 4000 tikets para la degustación de la morcilla de record se agotaron y fueron muchos los que no pudieron sumarse a ese “pincho solidario” a favor de Cruz Roja y Aspanias. En el acto, y acompañando al comisario de Guinness, se encontraban el alcalde de Burgos, Javier Lacalle, el vicealcalde Ángel Ibáñez, Fernando Gómez, concejal de Cultura y Turismo, Mariano Palacín presidente de la Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo y Pedro Palacios, Director General Capital Española de la Gastronomía.
Pasadas las 10:30 de la mañana, se lograba el primer reto, pero aún quedaba más, y poco antes de las 13:30 horas cuando se batía el segundo.
Javier Lacalle apuntaba que lo más importante era haber conseguido el record y agradecía a todos los que han hecho posible este record, entre los que se encontraban los casi 500 voluntarios o los productores de morcilla que han participado en el evento. Lacalle recordaba que con este acto, se seguirá hablando de Burgos, algo que para la ciudad significa mucho, ya que Burgos vuelve a hacer historia y abría la puerta a otro posible record en un futuro. Por su parte, Roberto Da Silva, uno de los productores que ha participado en este record, volvía a agradecer l colaboración de los casi 500 voluntarios que han participado, sin los que no hubiera sido posible conseguir un record con este producto, que “es como nuestro hijo”, disciplinadamente, un domingo, sacrificando su tiempo ya que muchos llegaron a las 6:30h de la mañana para estar en primera línea “no ha fallado nadie”. El principal riesgo, que se rompiese la morcilla, se ha logrado. Se hizo un ensayo previo con todos los voluntarios, y aunque lo “hubiéramos hecho sin red”, el ensayo ha dado la seguridad de que todo saldría bien.
Pedro Palacios reconocía que es un día muy especial, por promocionar el turismo gastronómico, el producto gastronómico y por poder participar en una fiesta gastronómica en la que participan muchos burgaleses.
Para concluir el acto, los casi 500 voluntarios repartieron las 4000 tapas de morcilla y la bebida que mediante un tiket pudieron degustar los asistentes en un tiempo record, otro más a la mañana.
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