El SEPRONA de la Guardia Civil fruto de la investigación llevada a cabo desde hace tres años ha identificado e investigado al presunto autor del incendio forestal que se inició el 1 de septiembre de 2014, M.D.A.M. de 42 años de edad, al que se le imputa un delito de incendio forestal por negligencia grave. La colilla de un cigarrillo localizada en el paraje donde se iniciaron las llamas fue posiblemente la causante del incendio.
A las 15:30 horas de aquel día se produjo un incendio que tuvo su origen en una finca de rastrojo en un paraje de la localidad burgalesa de Mecerreyes y que tras extenderse por su término municipal y los de Puentedura y Quintanilla del Agua arrasó una superficie de 753 hectáreas, hasta su total extinción una semana más tarde.
La Guardia Civil, dada la gravedad del incendio, procedió al desalojo preventivo y temporal de varios vecinos de unas de las localidades afectadas por riesgo de que las llamas afectaran a las viviendas, como medida de protección para las personas, quedando calcinadas 603,7 hectáreas de terreno forestal, 145 de rastrojos y 4,45 de pastos.
Desde el primer momento se inició una investigación, localizando y asegurando la zona donde se presumía se había iniciado el fuego, aledaña a un camino que transcurre por el lugar, donde fueron revisados los cuadros indicadores necesarios recogiéndose vestigios e indicios, principalmente una colilla de un cigarrillo.
La marca del tabaco recogido, poco común, hizo que las sospechas se centraran sobre un grupo muy reducido de personas, entre ellas un varón vinculado con la comarca.
Las pesquisas realizadas durante estos años han descartado que el cigarrillo fuera arrojado por el personal presente en las labores de extinción.
Las conclusiones del informe técnico confeccionado de las causas del incendio determinaron que el mismo se originó como consecuencia del aporte de una fuente de calor externa tipo mechero, cerilla o colilla de cigarrillo.
El resultado del informe facilitado por el Servicio de Criminalística del Cuerpo concluyó que existían restos orgánicos en la colilla coincidentes con el perfil genético del principal sospechoso, por lo que en dependencias oficiales M.D.A.M. ha sido investigado como presunto autor de un delito de incendio forestal por negligencia grave.
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